A pesar de la crisis en el sector del consumo y el de la vestimenta, el negocio inmobiliario sigue mostrando cierta estabilidad en su crecimiento, indicó César Cáceres, presidente de Remax, tras la apertura de su convención anual, que se desarrolla hasta hoy en el Centro de Eventos de la Conmebol.
Dijo que este incremento del negocio inmobiliario va acompañado por un fenómeno natural que se produce en el mercado como es el crecimiento poblacional que experimenta el país y que es de alrededor del 5% anual. “Esto significa que cada año tenemos la necesidad de 15.000 viviendas más versus a la cantidad de viviendas que se construyen por año, que serían unas 10.000 en total. Esto demuestra, que hasta el momento, la demanda de viviendas sigue siendo mayor que la oferta que hay en el mercado”, explicó Cáceres.
Agregó que según datos de la Dirección General de Estadística, Encuestas y Censos, existe una demanda no satisfecha de cerca de 200.000 viviendas. “Por eso, estamos buscando estrategias para acompañar a los desarrolladores para que encaren construcciones de productos que la población necesita”, señaló.
Cáceres reseñó que hace cinco o seis años, los desarrolladores dirigieron sus ofertas a la clase prémium y desatendieron las necesidades de las clases media y baja. “Por eso, estamos acompañando y recabando información sobre la demanda y de lo que ofrece la oferta y hasta cuánto la población está dispuesta a pagar por una vivienda, del tipo que sea”, significó.
Alianzas. El presidente de Remax Paraguay indicó que los agentes inmobiliarios están buscando concretar alianzas con los bancos para lanzar productos que sean accesibles a la clase media.
”Si bien hoy existe la AFD para los préstamos para viviendas, para mucha gente comprar una casa sigue siendo inalcanzable, por el nivel de las cuotas de G. 4 millones o G. 4,5 millones, que es imposible de pagar para muchas personas”, adujo.
Agregó que están trabajando con las entidades financieras para ver la posibilidad de ofrecer productos con financiaciones que no lleguen solo a 15 años, como muestra la experiencia de otros países, y si se da en el país un crecimiento económico de más de 20 años, proponer que las financiaciones de créditos se extiendan a 20 o 30 años. “Con esto, las cuotas podrían ser de G. 2 millones, que es mucho más accesible que los costos que hoy existen en el mercado”, concluyó Cáceres.
Fuente: Ultima Hora